Realizar un buen entrenamiento de finalización a portería es fundamental en el fútbol por varias razones, tanto a nivel técnico como mental. Aquí te dejo algunos puntos clave que explican por qué es tan importante:
1. Mejora la precisión y potencia del disparo
Entrenar constantemente la finalización permite que los jugadores mejoren su capacidad para colocar el balón donde quieren, con la fuerza adecuada. Esto se traduce en más goles y menos disparos desperdiciados.
2. Desarrolla la toma de decisiones bajo presión
En un partido real, las oportunidades de gol suelen llegar en segundos. Un buen entrenamiento simula esas situaciones y ayuda al jugador a decidir más rápido si disparar, pasar o regatear.
3. Aumenta la confianza del jugador
Cuando un jugador ha practicado diferentes tipos de disparos (con ambas piernas, de volea, de cabeza, en movimiento…), se siente más seguro cuando tiene una ocasión de gol. La confianza es clave para un delantero.
4. Fomenta la creatividad y variedad de recursos
No todas las oportunidades de gol son iguales. Entrenamientos variados (tiros de fuera del área, uno contra uno con el portero, remates tras centro, etc.) amplían el repertorio ofensivo del jugador.
5. Mejora la lectura del juego
Los ejercicios de finalización muchas veces incluyen situaciones tácticas reales, lo cual ayuda a los jugadores a leer mejor los espacios, movimientos defensivos y posicionamiento del portero.
6. Incrementa la efectividad del equipo
Un equipo que entrena bien la finalización aprovecha mejor sus oportunidades, y eso puede marcar la diferencia entre ganar o perder un partido cerrado.
A continuación, te doy unos cuantos ejercicios para que mejores la técnica o tus jugadores la mejoren.

🔹 1. Finalización tras conducción y disparo (individual)
Variaciones: Cambiar ángulo de entrada, usar pierna no dominante, o limitar el número de toques.
Objetivo: Mejora del control del balón y precisión del tiro.
Ejercicio:
El jugador empieza a 20-25 metros del arco con un balón.
Conduce el balón a velocidad hasta la frontal del área sorteando los conos.
Dispara a portería al llegar a una zona marcada.

🔹 2. Pase + control + disparo (con compañero)
Variaciones: Pase de espaldas, pase aéreo o pase tras rebote del portero.
Objetivo: Trabajo de control orientado y definición rápida.
Ejercicio:
Un jugador da un pase desde fuera del área.
El que recibe controla y finaliza en 1 o 2 toques.
🔹 3. Finalización tras centro lateral
- Objetivo: Remate en movimiento (de cabeza, volea, interior…).
- Ejercicio:
- Un jugador en banda lanza un centro (raso o aéreo).
- Uno o dos jugadores atacan el área para rematar.
- Clave: Temporización del desmarque y variedad de remates.

🔹 4. 1 vs 1 con el portero
Consejo: Trabaja distintas soluciones (picada, regate, tiro cruzado…).
Objetivo: Decisión en el cara a cara y definición con frialdad.
Ejercicio:
El jugador parte desde el centro del campo con balón o tras un pase filtrado.
Enfrenta al portero en un 1v1.
🔹 5. Finalización bajo presión (con defensa)
- Objetivo: Tomar decisiones rápidas en situaciones reales.
- Ejercicio:
- Dos atacantes vs un defensor + portero.
- Inicia con pase del entrenador o desde medio campo.
- Objetivo: finalizar antes de que el defensor recupere o bloquee.
- Extra: Poner tiempo límite para tirar (ej: 5 segundos).
🔹 6. Circuito de tiros rápidos
- Objetivo: Ritmo alto, precisión en la fatiga.
- Ejercicio:
- Tres o cuatro estaciones de disparo (conducción, pase y tiro, volea, tiro de primera).
- El jugador pasa por todas y finaliza en cada una.
- Ideal para cerrar entrenamientos con intensidad.